Existen

Existen palabras que no se dicen

Ni tampoco se escriben

Ojos que se ven

Pero no me atrevo a mirar

Que no deseo entristecer

Que no quiero hacer llorar

Existen manos que no se tocan

Que nunca se encuentran

Verdades que no deben decirse

Y que no debí mencionar

Que quise decir

Que desearía olvidar

Existen besos que no se dan

Que se sueñan

Culpas que se soportan

Y que soy experta en crear

Que quiero tirar a un pozo

Qué ya no quiero cargar

Existen

Existen

Esas palabras

Esas manos

Esos besos

Existen en escenas no actuadas

En guiones no escritos

En el escenario de las mentes atormentadas

De las mentes enamoradas       

compañerito querido

Ay ay ay compañerito querido

Por si acaso antes no lo hubiera dicho, aprovecho ahora y te lo digo

No la escuches, no sigas su camino

De verdad te lo pido, a diferencia suya yo no me contradigo

Lleva aún es sus manos un aroma ajeno

Su corazón aún late al ritmo del tango 

No sigas prestándole amor a quien te debe tanto

Retrocede ahora mientras el día aún se ve ameno

Por lo que más quieras te lo ruego

Y lo digo y lloro mientras la veo, porque no sabe que su dueño es el ego

Te lo cuento porque yo sí te quiero

No subas a ese tren, ahorrate el duelo

No es mala, solo está con soledad aguda

No es que seas poco, sos demasiado

Decime cómo te ayudo a sobrellevarlo 

Porque quizás no valga ella tanta locura.

Mi manta color lila

Tengo una manta color lila. La llevo conmigo siempre.

Es suave y calentita pero ya siento que es demasiado pesada para mí.

A veces de noche siento que me quita el aire por lo pesada que es y ando buscando alguien que quiera compartirla, llevarla de a ratos .

No supe si debía regalarla o canjearla por otra de igual valor, y quise prestársela a alguien pero sentí frío sin ella; y me fue devuelta sin lamentaciones. Ahora mi manta huele a otra persona y me cuesta volver a acostumbrarme a dormir con ella; porque cada vez que quiero usarla siento como si aún no la hubiera recuperado.

No encuentro quién quiera esta manta. Esta que sabe dar tanto calor en invierno, que reconforta tanto en medio de una gripe.

No quiero poner un aviso en el diario, preguntando si alguien quiere venir por ella.

Es bonita y tierna y merece que alguien la note, que alguien la quiera llevar a casa.

Padre

Este poema fue escrito el 22/04/2019 mucho más extenso, con otro nombre y quizás hasta con otro sentido. Luego lo modifiqué y fue publicado en el diario BambaCoop de Carlos Paz 😍

Padre nuestro, Padre mío:
perdón te pido por lo que siento y lo que haría,
por todo lo que finjo y lo que es mi vida,
por cada mentira escondida en mis deseos,
por juzgar sin saber verme en un espejo.
 
Cargo sueños que postergo y pecados que observo,
años de mirar y juzgar lo que termino haciendo,
lágrimas de miedo que se borran con palabras,
promesas cargadas de polvo y telarañas
y esa música que llega cuando nadie la llama.
 
Perdón por la paja en mi ojo,
perdón por esto que no es poema ni enojo,
que es algo entremedio, nacido de sábanas,
de una noche fría y una lágrima en calma.
No me dejes caer aunque lo intente, papá,
hablame... decime... y saldré corriendo de acá.
 
Me avergüenza el desprecio de tu ausencia
y mi tonta venganza sin audiencia.
que tu bondad me detenga;
Dios, que algo me muestre que no debo,
que hay algo mejor detrás de aquello que tengo,
que no haya más demencia,
que llegue mi cordura,
que retorne mi paciencia.

tan

Tan pequeña que desaparezco
tan grande que soy presumida
tan fea que me veo linda
que mi vicio es el espejo
y mi obsesión el reflejo

Tanto desprecio encuentro
en esto que llamo mi cuerpo
que hago todo lo que puedo
con mi sistema digestivo
por acumular tejidos
que subo a ese vidrio
que mide mis kilos
y con cada número finjo
terror y astío

Tan yo que leo y no escribo
que sueño y no vivo
que reviso y reviso
ese portal de noticias
de un mundo que no es mío