domingo, 28 de junio de 2015

Dónde

 Mi corazón me duele a causa de mi mente.
 Los libros me enseñan sobre amor y  la vida me enseña a tener miedo.
 ¿Dónde estuvo tu hombro cuando mis lágrimas necesitaron derramarse sobre él?
 Si no te conozco ni nunca me juraste tu amor ¿Por qué aún así siento que estás faltando a tu promesa?
 ¿Cómo hago para calmar esta bestia asustada que se esconde en mi pecho?
Siento que necesito encontrarte, como si tuvieras todas las respuestas.
 ¿Bajo qué máscara te escondés? ¿Acaso ya llegaste y no pude verte a causa de mis dudas? ¿Acaso mis miedos hablaron más fuerte que tu voz?
 Quiero que sepas que sigo pensándote, esperando que me rescates, mientras mis lágrimas siguen cayendo al vacío y mi ritmo sigue alocándose sin sentido alguno.
 Aún así le agradezco a mis ojos el dejarme derramar el dolor y a mi corazón el no haberse rendido.  Quizás deba olvidarte.
 Le pido perdón a Dios por mi falta de fe
 Le pido perdón a la vida por mi cobardía
 A vos no puedo pedirte perdón porque no te he hecho nada, porque a veces siento que vivís dentro de mí, esperando que te deje salir, salir y respirar para darme el aire que tanto necesito. Sólo puedo seguir esperando. Esperando que tal vez algún día me encuentres. O yo te encuentre.
 Si tan sólo supiera en dónde debo buscarte.